Uno de los concursos más divertidos fue el de Rocket Water (Cohetes de Agua).

Los cohetes de agua son unos cohetes hechos con botellas grandes de refrescos, llenos de agua y a los que se les suministra aire a presión. En algunos casos se empalman varias botellas. En las versiones más sencillas, el aire a presión se puede suministrar con una bomba de aire para bicicletas, pero en esta ocasión se utilizó una bombona de aire comprimido, lo que dió la potencia suficiente para que algún cohete subiese alrededor de 100 metros.

En alguna foto se ve cómo un cohete pasa cerca de un parapentista que va a aterrizar.

El ganador fue Gerardo Bielsa.