La Comunidad Virtual de Parapente y Paramotor

Tarjetas Amarillas

por reportajes
25/8/2007
Un concienzudo análisis de las trayectorias GPS, realizado por los responsables del Red Bull XAlps, mostraba que Müller, Lötscher y más tarde Wirtz, habían infringido el espacio aéreo suizo
de Sion. Así que se les impuso una penalización de 36 horas que tuvieron que cumplir en el
punto de control de Mt. Gros.

“Cuando me lo dijeron me sentí destrozado y pensé en abandonar”, contaba más tarde Müller.
“Entonces descansé, comí, me duché, pensé sobre ello y decidí que iba a terminar la carrera
como la había empezado!” .

Crecido ante la adversidad que había extinguido su sueño de ganar la carrera, Müller despegó y
atravesó Francia como un auténtico poseído, rumbo fijo hacia Mónaco. Hofer se dirigió hacia el
oeste, en una ruta más larga pero más estable, al sur de los Alpes franceses. Coconea continuó
su marcha baja por los valles y Lötscher se mantuvo por los picos altos.

El 3 de agosto, tras 12 días de carrera, los caminos de Müller y Coconea convergían en lo alto
de Col De Galibier al amanecer de un día de cielo azul. Errores tácticos habían dejado
totalmente confundidos a Hofer y Lötscher, quienes con tan sólo 200 km por delante y en
cabeza, sabían que tenían que darlo todo.

Los dos despegaron a mediodía, pero Mueller desplegó toda su artillería y mostró su
excepcional capacidad de vuelo dejando atrás al rumano y aterrizando 50 km al norte de la
meta. Coconea aterrizó más lejos y con pocas posibilidades de volar a través de los últimos
valles que llevaban a la costa. Pero ambos preparados para caminar hasta Mónaco.

Después de haber liderado gran parte de la carrera, Hofer se encontraba a 100 km de los
cabecillas y se alejaba cada vez más del título. Lötscher pasaba por mayores apuros y ni
siquiera había logrado llegar a Col De Galibier, desde donde Mueller y Coconea habían partido
ese día. Pero a falta de que se aplicara la penalización de 36 horas a Mueller, Coconea parecía
dispuesto a utilizar toda su voluntad y resistencia para acabar con la dominación suiza en el Red
Bull X-Alps.