Caminando y corriendo durante toda la noche, Coconea iba comiendo ventaja a Müller y para
media tarde se abría paso por las calles de Niza en su camino hacia la victoria. ¿O era sólo lo
que pensaba?
Como aeronave enemiga detectada en un radar, Hofer aceleraba a toda velocidad hacia la
costa. Aunque había comenzado el día en una posición llamada al fracaso, estaba haciendo lo
que mejor se le da: volar rápido y decidido.
Müller llegó el primero a Mt Gros a las 17:10 h el día 5 de agosto, casi 14 días después de que
diera comienzo la carrera. Pero, casi cuando Müller comenzaba a cumplir su penalización por
haber infringido el espacio aéreo, Hofer aterrizaba a tan sólo 15 km de allí y estaba listo para el
sprint final.
Con las piernas en plena forma comparado con Coconea, hizo cumbre en Mt Gros a las 21:00,
asegurando su segundo título en el Red Bull X-Alps. Coconea llegó a la 1:00, totalmente
destrozado.
Hofer voló hacia Mónaco al amanecer para reivindicar oficialmente su victoria: su segundo título
y el tercero de Suiza en esta prueba. Coconea llegó en segundo lugar y fue recibido como un
auténtico héroe. Müller, aterrizó en tercer lugar al día siguiente después de cumplir la
penalización.
Lötscher, una vez cumplida su penalización, llegó a la meta al mediodía haciéndose con el
cuarto puesto.
Kaoru Ogisawa (JPN), el primer competidor asiático en un Red Bull X-Alps, llegó a la playa el día
17 después de recorrer volando 200 km el día anterior y ocupó un bien merecido quinto puesto.