La Comunidad Virtual de Parapente y Paramotor

Despedida.

por superop
11/4/2010

Siempre he creído que las cosas hay que hacerlas cuando uno puede, no a posteriori.

Es como cuando se da un premio póstumo a alguien. Ya es demasiado tarde.

 

Por eso, nada más que por eso, he decidido despedirme, ahora que estoy vivo y sano y en plenitud de facultades.

 

Básicamente, tengo una buena esperanza de vida, nada hace suponer que mañana mismo ya no esté aquí. Pero todos sabemos que los accidentes existen y están ahí, en cuanto salimos de casa y nos subimos en el coche para ir al trabajo, por poner un ejemplo cotidiano.

Pero si en algún momento eso ocurre, necesito saber que en algún momento me ha dado  tiempo de decir adiós…

 

Adiós, viento, gracias por haberme paseado en tu seno, haciéndome subir contigo y dejando que me mecieras en un hermoso baile…

 

Adiós, agua, por haberte formado en forma de nubes a las que desear acariciar, por haberte evaporado y condensado luego para que yo pudiera ver esa bruma que me permitió llegar tan alto…

 

Adiós, tierra, que dejabas que te abandonara y pacientemente esperabas mi regreso, mientras yo contemplaba mi alma allá arriba…

 

Adiós, fuego, que en forma de columnas de humo tantas veces me indicaste la orientación y velocidad del aire en los lejanos valles…

 

Adiós, pinares, en las copas de vuestros árboles por las tardes, con el sol de espaldas, pude ver el espectro de Broken creándose luminoso para sumergirme aún más en mi vuelo interior…

 

Adiós, valles y roquedales, ríos, torrentes, lagos, montañas, verdes prados, nieve, calor, frío y niebla, calima y sombras… elementos a los que contemplé con mudo estupor mientras volaba por encima o era acompañado por vosotros…

 

Adiós, luna, con tu frío iluminar me regalaste un nuevo mundo en el paisaje cotidiano para poder realizar un par de vuelos furtivos robados a la noche…

 

Adiós, vela mía… fuiste el material con el que tejí mis sueños más bellos…

 

Adiós amigos y compañeros de vuelo, con vosotros aprendí todo lo que supe, con vosotros viajé a nuevos sitios, compartimos risas, compartimos llantos también, compartimos vida, a fin de cuentas…

 

Adiós, amada mía, tú ya sabes volar, cada vez que despegues los pies del suelo, podrás conectar conmigo…

 

Como decía el viejo Caballo Loco cuando lanzaba a sus guerreros al combate… ¡Hoka Hey! ¡Hoy es un buen día para morir!